Más mujeres en tecnología: una oportunidad para la economía y el futuro

En un mundo donde la tecnología es el motor del desarrollo, la inclusión de las mujeres en la industria no es solo una cuestión de equidad, sino una estrategia económica clave. Según el Foro Económico Mundial, la desigualdad de género genera pérdidas de $12 billones en el crecimiento global, mientras que la plena participación femenina podría aumentar el PIB mundial en un 20%.

La Directora de Lyra Argentina, Valeria Rodriguez, subraya esta realidad: “la igualdad de género es crucial no solo desde una perspectiva ética, sino también económica. Recientemente leí que, según el Foro Económico Mundial, la evidencia muestra que la inclusión plena de las mujeres en el mercado laboral no solo reduce desigualdades, sino que también impulsa el crecimiento y la competitividad de las economías. Por ello, tanto las organizaciones como los gobiernos deben asumir un compromiso real para cerrar las brechas existentes, garantizando condiciones laborales equitativas y fomentando un entorno en el que la dignidad y el talento de todas las personas sean valorados por igual”.

Brechas persistentes y avances significativos

Aunque las mujeres han ganado espacio en puestos de liderazgo, siguen siendo minoría en los cargos ejecutivos. Esto limita la creación de redes de apoyo y oportunidades para impulsar el crecimiento profesional. Nina Anziska, International Growth & Expansion Lead de Outschool, destaca este desafío: “aunque las mujeres han ganado espacio en puestos de liderazgo, aún son minoría en cargos ejecutivos, lo que limita la existencia de redes profesionales de apoyo entre ellas. Contar con una comunidad sólida de pares es clave para enfrentar desafíos a nivel empresarial, de equipo y de rol. Sin embargo, sigue habiendo una gran brecha en la conexión entre mujeres ejecutivas de distintas industrias, una red que podría impulsar el liderazgo femenino al siguiente nivel. Si bien se han roto barreras en los niveles más altos, todavía persiste una falta de confianza en roles de gerencia y dirección, lo que dificulta la transición hacia posiciones ejecutivas. Factores como el síndrome del impostor, los pensamientos autolimitantes y la duda pueden hacer que muchas mujeres no expresen sus ideas y opiniones más influyentes, frenando así su crecimiento profesional. Es fundamental cerrar esta brecha y brindar a las mujeres en estos niveles de liderazgo las herramientas necesarias para fortalecer su confianza y presencia, permitiéndoles avanzar con mayor solidez en sus trayectorias”.

Por otro lado, el cambio en la industria es evidente. Mariana Verderame, Country Manager Cono Sur de Adsmovil, reflexiona sobre su propia experiencia: “demostrar que mi capacidad iba más allá de mi condición de mujer. En los 20 años que llevo de carrera siempre he tenido que reportar a hombres. La maduración en los años y en la experiencia hace que una se sienta más segura al momento de comunicar sus ideas y defender sus estrategias. Pero sí es verdad que hubo momentos más difíciles de transitar por el solo hecho de ser mujer. Con esfuerzo y perseverancia, he demostrado que mis aptitudes van más allá del género y agradezco el cambio que se ha generado en estos años haciéndole los caminos más fáciles a las generaciones venideras”.

Un nuevo futuro: estrategias para cerrar la brecha

Superar los desafíos estructurales requiere acciones concretas: programas de mentoría, políticas de contratación inclusiva, transparencia salarial y capacitaciones en diversidad. Silvia Pérez, Directora y socia en SEIDOR Argentina, enfatiza: “Las mujeres en la industria tecnológica enfrentan desafíos como la brecha de representación, la desigualdad salarial y los estereotipos de género. Superar estos obstáculos requiere acciones concretas como programas de mentoría, políticas de contratación inclusiva, transparencia salarial, capacitaciones en diversidad, opciones de trabajo flexible y el fomento de una cultura empresarial inclusiva. Otro desafío clave es no ponernos límites a nosotras mismas. Está demostrado que las mujeres tenemos la capacidad de alcanzar roles de liderazgo y dirección, y para lograrlo es esencial confiar en nuestras habilidades y mantener una capacitación constante, tanto en aspectos técnicos como en nuestro desarrollo integral”.

Asimismo, el respaldo desde las altas esferas empresariales es fundamental para el cambio. Linda Ruiz, Directora Regional de MGID Latam, enfatiza: “sin duda, ser parte de una minoría en la industria conlleva desventajas. Pueden surgir expectativas relacionadas con el género, lo que frecuentemente provoca la sensación de tener que demostrar nuestro valor. Por eso, hacer que la inclusión sea fundamental en la identidad de una empresa y forjar conexiones entre mujeres en toda la industria es tan vital”.

Sin dudas, el mercado actual presenta una oportunidad única para reducir la brecha de género. Empresas tecnológicas han comenzado a adoptar estrategias de diversidad que fomentan la contratación y promoción de mujeres en roles clave. Maria Paula Silva, Director of Strategic Sales, North LATAM en VTEX, lo confirma: “estamos en un momento donde las mujeres tienen un alto nivel competitivo en el mundo laboral. Cada vez son más las empresas y las organizaciones que entienden la importancia de esa variedad y de esa diversidad de la que hablábamos anteriormente, por ende están activamente buscando contratar mujeres”.

Cerrar la brecha de género en tecnología no es solo una meta deseable, sino una necesidad imperativa para el crecimiento sostenible de la industria.

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