¿Por qué los CIOs luchan con la nube?
Es que a pesar de su crecimiento, la computación en la nube cuenta con defensores y opositores. En este marco, un reciente informe de NetApp menciona que los CIOs actuales, que son los que deben considerar un uso estratégico de la Nube, generalmente se encuentran luchando una batalla de varios frentes, ya que no solo deben mitigar los temores y manejar las expectativas internamente. Lo deben hacer conformes a los términos y las contingencias con los proveedores de servicios en la Nube. Más detalles del informe, en esta nota.
Según NetApp, entender que migrar a tecnología en la Nube puede ser algo complicado; permite a un CIO avanzar de manera inteligente y estratégica, con el propósito de preparar a la empresa para aprovechar los beneficios de una sólida estrategia de Nube en la forma más eficaz y eficiente.
Si esto se hace correctamente, los beneficios pueden ser infinitos, pero una estrategia de Nube eficaz siempre se debe alinear con los planes de arquitectura empresarial. Asimismo, la implementación de los distintos niveles de procesamiento en la Nube puede ofrecer ventajas substanciales. Es decir, con la adopción de tecnología cloud, las empresas pueden percibir incrementos importantes en los tiempos de entrega de aplicaciones nuevas, hacer un mejor uso de la capacidad de almacenamiento, y ahorrar millones de dólares anualmente en costos de soporte de hardware y software, y contar con una infraestructura tecnológica que sea más fácil de escalar para adaptarse a las cambiantes cargas de trabajo.
Antes que nada, el CIO debe entender que la Nube no es un algo mágico capaz de administrar todo con sólo oprimir el botón de Guardar o de Enviar, y que puede ofrecer mucho más que solo alojamiento. Ellos tienden a sobreestimar el conocimiento que sus empleados tienen de la Nube, lo que implica un riesgo. Este conocimiento no sólo es relativamente nuevo, sino que también se ha presentado a la gente en una manera que genera expectativas sumamente altas entre los usuarios finales.
En este aspecto, NetApp nombra retos cotidianos a considerar ante los problemas en la nube. Si una aplicación o servicio está causando problemas, los usuarios finales llamarán al departamento de TI en busca de una solución. Además, un CIO debe negociar contratos rigurosos con los proveedores de Nubes antes de la implementación; y las expectativas que establece el proceso de TI para soportar una infraestructura en la Nube, se deben auditar periódicamente para evaluar su efectividad e identificar posibles problemas. Por otra parte, adoptar una infraestructura cloud requiere de nuevas funciones corporativas de TI.
Las eficiencias que ofrece la Nube reducirán la necesidad de actividades de TI tradicionales, como administración de bases de datos y de servidores, y, al mismo tiempo, ampliará la necesidad por experiencia en seguridad, virtualización, almacenamiento y automatización de procesos. Es por esto que, antes de realizar cualquier transición, el CIO debe asegurarse de que el equipo de TI de la empresa cuente con el conjunto adecuado de habilidades.
De no ser así, se deben tomar decisiones respecto a contratar expertos o subcontratar profesionales de los proveedores de Nube. Puede parecer difícil, pero en realidad el éxito sólo depende de las decisiones que tomen hoy los CIOs. Los que implementen con efectividad una estrategia de cómputo virtual, basada en las realidades estratégicas y en las necesidades empresariales, generarán niveles sin precedentes de alcance y de eficiencia. La Nube es un facilitador de negocios: el foco debe ser puesto en los beneficios para los negocios, y estos impactará positivamente en los objetivos financieros y estratégicos de la empresa.